miércoles, 27 de febrero de 2013

Silence in the garden III
















domingo, 17 de febrero de 2013

To do it for happiness


He estado tomando fotos como loca, y no me había sentido tan feliz estos en estos últimos años como me he sentido estos meses. Estoy haciendo lo que me gusta sin ataduras, presiones o críticas. Me estoy conociendo mas dentro de la fotografía. Estoy aprendiendo de mis propios errores tanto en mis propias exigencias perfeccionistas, las cuales aveces las encuentro erróneas. Poco a poco me estoy dando cuenta que tal vez este no sea mi momento de ser comercial, y sí de aprender. 
Hay tanto que tengo que aprender todavía, y claro que entiendo que en la vida estamos en aprendizaje constante todo el tiempo, sin embargo me he estado forzando a ser comercial sin todavía aprender de mí, aprender de este tipo de arte del cual estoy entregada. Al aprender me refiero a mi propio tipo de aprendizaje personal, el que yo he escogido, el que es sencillamente vivir la vida, investigar en internet sobre otros fotógrafos, conocer mas mi cámara, salir a la calle a capturar lo que observo que es la vida, observar, sentir, capturar, sin excederme analizando y tratando que sea perfecto todo.
La filosofía que ahora decido seguir en la fotografía, y poder obtener las imágenes que busco se basa en 3 simples puntos; 1) No hay tal cosa mas horrible que las reglas. Yo veo el arte de tomar fotos como una cosa que tiene que ser imperfecta. Lo puedo comparar como veo al ser humano, como algo imperfecto e increíble a la vez, algo que si se intenta llegar a la perfección, fallara y no podrá ser ni existir. No hay tal cosa como reglas en la fotografía, no puede haber una perfecta planeación. Simplemente no se puede planear cada detalle sobre capturar un segundo!. La imperfección es belleza. 2) La fotografía es real. Siento que dentro de mis fotografías me he salido un poco del camino a donde quiero llegar con esto, pero a lo que me refiero, es que una imagen te enseña un fragmento pequeño de lo que es la inmensidad de la vida, te deja un pequeño recuerdo, algo que fue, una parte de la historia de alguien, algo que ha pasado, lo real en todos sus sentidos, y tiene que tener un sentido. 3) Hace reflexionar. Claro que esto personalmente ahora lo encuentro muy difícil aveces, pues claro que apenas estoy empezando!. Pero claro que una foto te hace reflexionar, ya sea algo muy hermoso situado en algún lugar lujoso o extravagante, o un ambiente que se pueda considerar feo o diferente. Una buena fotografía es la que te hará parar por un segundo, observar y reflexionar.
Ahora entiendo que tal vez me esté adelantando un poco a querer de repente saltar al mundo profesional, o tal vez no... ¿yo que sé?. Lo que si sé, es que este es mi momento de aprender, de investigar, de experimentar, y mas que nada de tomar miles de fotos. 
Lo que ahora se es que quiero llenar mi mente y cuerpo de vida, de imágenes mentales que capture con mis ojos. Somos una cámara viviente que captura memorias para el corazón. Lo que quiero hacer es escuchar experiencias, vivir, aventurare, aprender viviendo. Aprender viviendo. 
Tal vez venga un trabajo, si llega lo aceptaré porque voy a querer y me podrá llevar a los lugares a donde quiera llegar. Por ahora doy gracias que no veo como una necesidad tener que ganar dinero para encontrar mi propia felicidad, porque puedo hacer libremente lo que me gusta, este el dinero involucrado o no. Soy joven, hambrienta por conocer el mundo y la vida en varios lados de ella. Soy joven, nerviosa, feliz, estúpidamente inteligente, a mis manos les sale chispas de energía y estoy feliz, y estoy apenas aprendiendo, apenas comenzando.